Una de las estrategias empresariales más actuales de cara a reducir los costes en salarios es la llamada deslocalización, es decir trasladar algunos centros de trabajos a zonas o países con un coste salarial menor. A veces esta tendencia no da sus frutos, algo que parece haber comprobado Telefónica. La compañía de Cesar Alierta ha elegido a Las Palmas de Gran Canaria como lugar para implantar el nuevo call center de la compañía y que sustituye al que estaba en Colombia
El edificio Basconia que cuenta con 3000 metros cuadrados, será la sede de los 1000 empleos directos que Telefónica, 400 de ellos serán ocupados antes de final de año, mientras que los 600 restantes serán para 2013.
La contratación está a cargo de Emergia Canarias, cuyo proceso de selección se realizará a partir del mes de Agosto. La operadora ha elegido esta zona porque tiene importantes beneficios fiscales y económicos con respecto a otras zonas por su situación geográfica.
Este centro supondrá un nuevo cambio para el 1004, el servicio de atención al cliente, y atenderá las 130.000 llamadas mensuales de clientes canarios, a los turistas que necesiten atención en el servicio de roaming, así como en algunos casos a clientes que vivan en Latinoamérica.
En los últimos años, la mayoría de los operadores apostaron por América Latina para abrir sus plataformas de atención al cliente con el objetivo de ahorrar costes, sin embargo, las quejas de los clientes y los malos resultados sobre la satisfacción provocaron dudas en la mayoría de las operadoras.
El problema es que los trabajadores que estaban al otro lado de la línea tenían escasos conocimientos técnicos y los usuarios no eran capaces de solucionar sus problemas.