Según datos suministrados por la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), los operadores alternativos acapararon las nuevas altas durante el año pasado. El mercado de internet de banda ancha, por otro lado, creció un 5,7%; esto significa que se añadieron más de 600.000 líneas, y el total en activo superó los 12 millones.
Mucho más espectacular fue el crecimiento de la fibra óptica: el número de hogares con esta conexión prácticamente se duplicó, alcanzando las 608.595 líneas activas a final de 2013 frente a las 332.490 del año anterior.
Sin embargo, el mercado de telefonía no ha tenido tanta suerte como el de Internet. Por el lado de los móviles, el año pasado se perdieron más de un millón de líneas, de forma que el parque terminó el año con 51,87 millones (un descenso interanual del 1,9%). Cabe destacar que hubo operadores que salieron ganando dentro de este declive general. Así, los OMVs se anotaron más de dos millones de nuevas conexiones a lo largo del año.
El año también estuvo marcado por la gran cantidad de portabilidades: 6,77 millones, lo que representa un aumento de casi el 30% respecto a 2012. No hay duda de que esta alta tasa de portabilidades ha favorecido a los OMVs.
Por último, la telefonía fija continúa su paulatino declive con la pérdida de 223.848 líneas, un descenso interanual del 1,2%. Esto deja el parque de líneas en 18,898 millones.