Parece ser que en 2014 los españoles nos hemos gastado un total de 149,9 millones de euros en música grabada, lo que supone un 21,2% más que en 2013 según los datos de Promusicae.
Este repunte llega tras 12 años de caídas y se convierte en el primer cambio de tendencia en venta de música de todo el siglo XXI en nuestro país.
Las nuevas formas de consumir música como YouTube, Deezer, Vevo, Xbox Música y Spotify parecen haber sido la causa de esta buena noticia. La escucha en streaming ha hecho llegar a las discográficas unas ganancias de 47,2 millones, es decir, un 36,3% más de recaudación si lo comparamos con los 34,6 millones obtenidos en 2013. El streaming se sitúa así como uno de los grandes sustentos de la música gracias a su crecimiento de un 30% en suscripciones.
En el otro lado del ring se encuentran las descargas de canciones o álbumes a través de iTunes que desciende un 2% y la descarga de tonos o llamada en espera que únicamente generan 1,4 millones, una caída superior al 20%.