Mientras que en el computo total de conectividad de nuestro país el 61,06% de la población cuenta con banda ancha de al menos 100 megas, solo el 13,5% de la población del entorno rural cuenta con alta velocidad debido a la poca presencia en estas zonas de las tecnologías de nueva generación: HFC o FTTH incluyendo también el 4G.
Estos datos han sido aportados por el Ministerio de industria sobre el primer trimestre de 2015 y revelan que aunque suponen un aumento de cinco puntos en la cobertura general en relación con 2014, aún se perciben “diferencias significativas” entre zonas urbanas y rurales.
Aunque en el sector de la conexión a través de 4G y 3G los datos no son tan negativos gracias al aprovechamiento de infraestructuras existentes y gracias all Dividendo Digital, las diferencias entre zonas en el ámbito de la banda ancha fija son mucho más significativas. En el caso de la fibra, el computo general se sitúa en el 45% del total de la población frente al 25% que existía en 2014. Sin embargo, esta solo llega a un 5,1% de las zonas rurales españolas. De la misma forma, el cable que está en un 47% de cuota de alcance global solo llega al 9,8% si lo acotamos a zonas rurales.
Las ayudas por parte del Ministerio para avanzar en contra de esta brecha digital siguen su curso y los próximos años serán clave para este desarrollo.