La semana pasada nos sorprendió la noticia de que la operadora británica Talk Talk había sufrido un ciberataque dejando expuestos los datos personales y bancarios de sus más de cuatro millones de usuarios.
También contaron haber recibido la llamada de unos supuestos “hackers” que demandaban un rescate a cambio de no sufrir nuevos ataques.
Tras esto, se llegó a especular con la posibilidad de que estos “hackers” fueran islamistas radicales pero la sorpresa ha llegado cuando tras la investigación policial de estos días señala a un grupo de adolescentes entre los que ya han sido detenidos dos de ellos, de 15 y 16 años.
Los jóvenes de apariencia tranquila según sus vecinos y en dos zonas separadas, Feltham al Oeste de Londres y Antrim en Irlanda del Norte han tenido en jaque a la compañía de telecomunicaciones británica que ha sufrido tres ciberataques en los últimos 8 meses. Tras la alarma ocasionada, desde Talk Talk han querido rebajar la tensión asegurando que la agresión no ha resultado ser tanto como se temía y que las cuentas bancarias de sus clientes no corren peligro. Aun así, el Parlamento británico ha anunciado que creará una comisión para estudiar problemas similares ya que afectan a la seguridad de todos.