Hosting y hosting ‘extra-deluxe’

Andan las cosas revueltas en EEUU, por lo menos a altos niveles especializados en telecomunicaciones, y es que los principales proveedores de accesos a banda ancha, como pueden ser Verizon o At&T, muy conocidos en su casa, quieren crear un servicio de lujo para las empresas que hospedan y sirven contenidos de Internet que quieran pagarlo.

Este lujo consistiría simplemente en ir más rápido si pagas más. A nivel de usuario no dejamos de pasmarnos ante el hecho de que eso cree polémica. En este santo país, donde se supone que no somos paradigma de sociedad de consumo ni de libre mercado, donde se supone que somos normales, vemos muy lógico que el que quiera gastar poco use una tarifa plana de 56k, el que quiera un poco más paga por 1Mb. por ADSL y el que quiera 20Mb. que se conforme con menos porque no se lo van a dar. Lo vemos lógico, insisto, lo que no vemos tan ajustado a razón son los precios, conste en acta.Pero la polémica no se ha planteado en el país norteamericano a nivel de usuario, que nosotros sepamos, lo ha hecho a nivel de los gigantes de la red, es una lucha entre los que cortan, y se reparten, el bacalao. Frente a los ISP ya mencionados se alistan Google y eBay, que intentan influir en el Congreso de los Estados Unidos de América para que no se produzca lo que ellos definen como un atentado a la neutralidad de la Red. Más que neutralidad se referirán a fractura que crearía un Internet de ricos y otro de pobres, imaginamos.

Pero ¿en qué que le afectaría a Google, por ejemplo, que se aprobara la creación de este servicio de privilegio? Es indudable que Google podría pagar, sin notarlo siquiera, el plus para entrar en este selecto club, el problema consiste en que, aunque el buscador se abra en un par de nanomilesimas de segundo, de nada sirve dar links a páginas que tardarían siglos en abrirse. La gente terminaría aburrida, no del buscador en si, sino de la lentitud de las páginas que ofrece.

Como veréis lo que es normal por un lado, pagar más por más, por otro lado puede convertirse en una especie de impuesto revolucionario que o pagas o no eres nadie. Por ahora esto sucede allende los mares y a niveles de multinacionales, pero no dudamos que lo que allí se decida terminará afectándonos. Habrá que estar atentos para saber que nos espera por aquí en 3 o 4 años de plazo.

Actualización: Como era previsible el Congreso de los Estados Unidos de América ha dado su beneplácito para que se cree esta escisión a costa de la perdida de los derechos que tenían todos los sitios webs de ser tratados de igual manera. Ahora el que quiera ir rápido, a arrascarse el bolsillo.

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