Si algo tiene que hacer el partido
actualmente en el poder, urgentemente, es ganarse el voto de la
comunidad internauta, muy comprometido, por no decir perdido,
a raíz de la imposición del canon digital. El
PSOE calculaba que los descontentos por este tema iban a
decantarse por la abstención, pero las últimas
maniobras
del PP, abogando por la supresión del canon,
cuanto menos de palabra, hace peligrar el sentido de esos votos. Una
cosa es que un par de millones de votos no vayan a ninguno de los dos
y otra, muy distinta, que un significativo tanto por ciento de ellos
cambien de color.
Hoy nos encontramos con la primera
maniobra destinada a paliar ese peligro. El director general
para el Desarrollo de la Sociedad de la Información, un
tal David Cierco, del que no habíamos, hasta ahora, oído hablar, ha declarado,
con ocasión de un evento de la Federación de
Periodistas de España, que, si el PSOE gana las
elecciones, se creará la figura del Defensor del
Internauta.
Este hipotético cargo, para el
que no se ha sugerido aun ningún candidato, estará
encargado de tener en cuenta las opiniones de los internautas,
con un objetivo tan definido y concreto como el de «transformar
y facilitar la construcción de la sociedad de la información
y del conocimiento«. Y esto, por descontado, desde una postura
independiente, libre de presiones gubernamentales, de
sociedades privadas o de operadoras.
Como esto no calará en la
opinión pública, no descartamos que, una vez comprobado
que esta promesa no cambia los resultados de los sondeos, el próximo
paso sea el anuncio de una profunda revisión del
actual, y recién estrenado
en tarifas, canon digital. Quizás así merezca la pena
empezar a escuchar, que los temas de derechos de copia privada
y su relación con los P2P ya vendrán después.