El Ministerio de Cultura de Francia está valorando la creación de un nuevo impuesto para gravar la publicidad online. La recaudación iría destinada a la protección de los sites y contenidos que cumplen con los derechos de autor y a pagar a los artistas.
El impuesto, que gravaría según los beneficios obtenidos por esta partida a cada web, se aplicaría únicamente a las empresas que facturasen a partir de una cantidad determinada. Google, como principal beneficiario de los ingresos por la publicidad online y otras como Yahoo! o Facebook serían las principales pagadoras.
En el fondo de esta medida quiere frenar los
beneficios obtenidos por Google, pues consideran que proviene de los
contenidos de otros sites. Por ello, los miembros de la comisión
quieren poner límites a una situación que creen descompensada.
Con el
dinero recaudado se crearían medidas que promuevan la comercialización
de los contenidos que cumplan con el copyright, a pagar a artistas y a
crear una nueva licencia común, que estaría dirigida a promover la
negociación entre los sitios de descargas y las entidades gestoras de
los derechos. También las operadoras rebajarían el IVA pagado con las
ofertas de ADSL.
Google y los franceses van a tener que pagar la factura de los «amorios» del pequeño Hungaro y la Italiana, Car-lista.
En bonanza, todo es derroche. Ahora en crisis, cuando las arcas publicas están vacias (porque lo han gastado) se fijan en quien tiene ingresos y se los recortan. En la edad media se llamaba diezmo!
Si al menos fuese para llenar las arcas públicas! Pero es para las Sociedades de Autores y EDITORES… Osea, que a seguir pagando a aquellos que poseen los derechos de autor de obras creadas hace decadas, siglos ( por que con «adaptarla» a nuestro tiempo ya se considera propiedad del «editor» )y así ese grupo selecto puede seguir viviendo del cuento mucho más.