¿Cómo se puede regular la neutralidad en la red? De dos formas: la primera prohibiendo que los operadores limiten algún tipo de tráfico, pero también obligándoles a informar visiblemente cualquier limitación que puedan tener sus productos.
Esta es la opción que utilizan los operadores en Reino Unido, donde todas deben publicar información sobre cómo gestionan el tráfico, y muchas de ellas reconocieron (principalmente O2 y Be) que tienen limitaciones en las velocidades de vídeo o las descargas.
Claro que encontrar esta información en su web puede ser una odisea, y además va en forma técnica, para hacer más complejo el proceso. Por ese motivo, Ofcom, el regulador de ese país, obliga a que sean bien claros los términos de limitaciones, incluyendo la velocidad media que recibirá el cliente en realidad, el listado de servicios bloqueados, en caso de haber gestión de tráfico, mostrar cómo son sus velocidades y finalmente, prohíbe llamar Internet a cualquier tarifa que tenga alguna prohibición.
Esto último ¿cómo se traduce? Fácil, no se puede vender una tarifa como “Internet móvil” si tiene bloqueada la VoIP.