Imagino que sabíais que Santiago de Compostela posee una red WiFi/WiMAX propia. Lo que no podíamos saber es que el ayuntamiento está planteando seriamente hacerla desaparecer pues la demanda es totalmente nula, además de que son muy pocas personas las que utilizan el servicio.
El ayuntamiento está haciendo un último intento en que algún operador se encargue de ello, aunque ninguno muestra interés precisamente por lo mencionado anteriormente, por lo que el coste anual de 16.000€ recae únicamente sobre el organismo público.
¿Por qué? Porque el precio mensual para los usuarios es de 39€, muy elevado para las pocas prestaciones que ofrece. Esto es una muestra clara de lo que puede suceder cuando un despliegue no se realiza de forma correcta.