El pasado viernes, la Comisión Nacional de Competencia criticó el esquema de tarifas mayoristas que la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones ha establecido para Telefónica en banda ancha debido a que podría resultar perjudicial para la competencia.
“La CMT propone en muchos casos precios mayoristas elevados… Estos precios podrían llevar a una reducción de la presión competitiva de los operadores alternativos que utilizan la red de Telefónica, lo que puede perjudicar a los consumidores en forma de mayores precios y peor servicio”, indicaba la CNC.
Pero también advirtió que los altos precios que ha fijado la CMT disminuyen la capacidad financiera de sus rivales para desplegar redes alternativas.
Y es que, además, los precios de banda ancha en España son los más altos de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) según su último estudio, si se incluye el coste de línea. En concreto, la oferta más barata en España asciende a 31,3 euros incluyendo este coste, encabezando junto a Chile, Nueva Zelanda y Corea, la lista de los países más caros en servicios de banda ancha.
Respecto a la relación velocidad-precio del servicio, España también se coloca entre los más caros de los 34 países analizados en el estudio, con un precio de banda ancha por Mbps con cuota de línea en septiembre de 2010 de 1,16 euros. Un precio que queda muy alejado de los 0,08 euros por Mbps de Suecia, donde ofrecen la mejor calidad-precio.