Con la finalidad de ahorrar en costes, ambas compañías podrían hacer uso de 2.000 estaciones base de móvil y así beneficiarse mutuamente. Para llevar a cabo dicho proyecto sería preciso desmontar de mutuo acuerdo alrededor de 1.000 estaciones para luego recolocarlas en la estación más próxima a la de la compañía rival.
Con esta iniciativa se pretende economizar y evitar el gasto del alquiler y el mantenimiento o la seguridad.
El diario “Expansión” afirmaba que ya se han empezado a elaborar estimaciones acerca de los costes a las empresas proveedoras para hacer los cálculos acerca de si es o no rentable llevar a cabo la idea.
Si se llegase a dar el visto bueno se podría hacer una ampliación y en lugar de compartir 2.000, compartir algo más del doble, ya que entre Vodafone y Orange cuentan con más de 20.000 antenas (16.000 y 14.000 respectivamente).