La directora general de Consumo,
Etelvina Andreu, no se ha quedado corta al declarar que la
decisión de Telefónica de cobrar
la identificación de llamadas a todos sus clientes «puede
ser legal, pero es una conducta no leal«.
La amiga Etel se basa
en que hay millones de usuarios que disponen de este servicio sin
haberlo solicitado jamás, sin haber sido advertidos de que era
una promoción que tendría su fin y, añadimos
nosotros, muchos no disponen, todavía, de teléfonos con
pantalla donde ver el número entrante, como son los aun
abundantes Forma, y se
encuentran con tener que pagar algo no deseado e imposible de
disfrutar encima.
Consumo estudia el caso, y si se
tratara de una clausula abusiva, Telefónica tendría
que desistir de su intención y reembolsar lo hasta ahora
cobrado.
Paralelamente, la FACUA sí
que tiene en cuenta
el factor de los terminales antiguos junto con varios otros, como que
la ley es clara y contundente en las altas y bajas de servicios.
Alguien que no ha solicitado algo, jamás debe tener que
darse de baja de ello, sino al contrario, darse de alta si lo desea,
en contra de la teoría de Telefónica, que parte
de que todo el mundo goza del servicio, por lo que le va a cobrar a
todo el que nos se de de baja.
Por este motivo, y por que en la
legislación actual la identificación de llamadas esta
considerada una facilidad, no un servicio, la FACUA
considera que la legalidad de este cobro es muy discutible, y
solicita que se estudie a fondo los artículos legales
relacionados e, incluso, que se modifiquen para evitar estas lagunas
que redundan en perjuicio de los usuarios.