Quien avisa no es traidor o eso han debido pensar en Telefónica. Como hemos venido siguiendo en estas últimas semanas, hoy sabemos que Telefónica cumplirá su palabra y ha asegurado que de forma cautelar, recortará en un 35% su despliegue de red de fibra óptica para este año debido a la normativa de la CNMC que le obliga a compartir sus infraestructuras con otras operadoras en toda España a excepción de nueve municipios.
Esto se traduce en que, en comparación a las estimaciones que la compañía había presentado para 2015 y teniendo en cuenta este 35% menos anunciado, Telefónica dejará sin opción a fibra óptica a dos millones de hogares en nuestro país.
Según la multinacional española la decisión de la comisión reguladora pone en peligro sus inversiones al favorecer a sus rivales ya que estos no tendrán que invertir en instalar una red propia como ya ocurre con el ADSL.
Consecuencia de todo ello es esta ralentización del despliegue en algunas capitales de provincia y otros municipios donde Telefónica ya había empezado a desplegar fibra y que de momento quedan en el aire.