El negocio móvil de Vodafone se ha ralentizado en el último trimestre del año pasado, lo que ha llevado al operador a que sus ingresos en esos meses descendieran un 3,1%, siguiendo la línea de bajada que ya había mostrado el trimestre anterior aunque fue menor, de 2%.
Vodafone ha explicado que sus ingresos en servicios móviles descendieron a causa de las ofertas convergentes, como también al impacto que ha recibido por el cambio en la contabilidad de la financiación de los terminales.
Por otra parte en banda ancha, sus ingresos aumentaron un 12,7%, siguiendo la línea de crecimiento que había mostrado el trimestre anterior que fue de un 10,7%, captando 79.000 nuevos clientes, cifra que deja muy atrás a los 28.000 del trimestre anterior.
A su vez, ha indicado en el mismo comunicado que su fusión con Ono sigue a gran velocidad y esperan alcanzar el 100% antes que finalice este ejercicio fiscal.