Miguelturra ha tomado una
iniciativa que ha provocado que la CMT haya tenido que
trabajar duro estudiando el caso, tras lo que han emitido
una «Resolución por la que se pone fin al periodo de
información previa a la apertura de un procedimiento sancionador
contra el Ayuntamiento de Miguelturra y se acuerda no
iniciar el mismo».
El asunto es, simplemente expuesto,
que, ante la falta de interés de las operadoras de poner fibra
óptica en el municipio, el cabildo de esta ciudad ha decidido
cablear ellos mismos, con fondos públicos, y poner esa
infraestructura en alquiler para que sean las operadoras las que la
usen y amortizar así la inversión.
Estudiado el caso, la CMT no
solo archiva el expediente, sino que se muestra muy favorable a este
tipo de iniciativas por parte de las administraciones públicas,
destacando
de este tipo de redes la neutralidad, porque el Ayuntamiento
no interfiere en los tipos de ofertas y servicios que quieran dar las
empresas a los usuarios, la no discriminación, porque todos
los operadores pueden acceder a la red en igualdad de condiciones, la
transparencia, tanto para operadores como para usuarios y la
igualdad para todos los operadores para llegar a todos los
usuarios que tengan cobertura de la red.
La apuesta de la CMT es la de
“estimular la puesta en el mercado de infraestructuras tanto por
parte de las administraciones públicas, como de empresas gestoras de
servicios de interés general o de los operadores de
telecomunicaciones”, y nosotros lo vemos muy, pero que muy, bien y
felicitamos a Miguelturra
por establecer este precedente.