Si alguien se preguntaba por qué necesitamos cada vez mayor ancho de banda y una nueva generación de conectividad móvil que se materializará en forma de la 5G a partir de 2020, la mejor respuesta tal ve se encuentre en el reciente estudio que Cisco ha publicado sobre el futuro del tráfico de datos en Internet, y que arroja una cifra muy aclaratoria: para 2021 se espera que el tráfico IP se haya multiplicado por tres respecto al que tenemos ahora en 2017.
De este tráfico, el 82% corresponderá al vídeo, por lo que el ancho de banda debe ir aumentando progresivamente, sin pausa, o nos podremos encontrar con un verdadero problema a la hora de gestionar dicho tráfico. Para llegar a esta cifra hay que tener en cuenta no solamente el vídeo en streaming correspondiente a servicios como Netflix o YouTube, sino también aquel que podemos enviar desde nuestros smartphones, o el que envían cámaras de seguridad IP a la nube.
En 27.100 millones de dispositivos conectados cifra Cisco la cantidad de aparatos que tendrán acceso a la red de redes en 2021, más de la mitad de los cuales (el 51%) corresponderán a la IoT, es decir, a sensores y otros aparatos conectados que envíen datos de todo tipo a la nube.
Actualmente se generan y envían por la red en todo el mundo 1,2 Zettabytes de datos anualmente (2016), cifra que se irá incrementando paulatinamente hasta llegar a los 3,3 Zettabytes en 2021, lo que supone una tasa de incremento interanual del 24%.
Para el mismo año 2021, Cisco calcula que en el mundo habrá más de 4.600 millones de internautas, más de la mitad de la población mundial (un 58% para ser exactos), una cifra que crecerá desde el 44% de la población mundial (3.300 millones de personas) registrados como internautas. La relación entre dispositivos conectados e internautas será, pues, de 3 a 1.
Para España, las cifras de crecimiento del tráfico IP serán muy parecidas a las del resto del mundo, con un índice de penetración de la conectividad a Internet de 4 de cada 5 españoles.