De nuevo la Audiencia Nacional
decide que las pretensiones de Orange son desproporcionadas y
que todas sus denuncias y peticiones de medidas cautelares se reducen
a intentar que Telefónica le ofrezca su fibra óptica
a través de un mercado mayorista regulado a precios bajos, lo
que sería competencia de la CMT, que no está muy
por la labor.
En apenas seis días la Audiencia
ha decidido
que la actual legislación de la CMT se ajusta a derecho
y que Telefónica ha cumplido con ella, por lo que
levanta las medidas cautelares impuestas y deja a la operadora
incumbente en libertad de continuar con la implantación de la
fibra óptica.
Nuevo récord, la vez anterior
tardó una semana.
En la resolución se recoge que
las pretensiones de la filial de France Telecom no son más
que maniobras «basadas en criterios de oportunidad», que es
bastante que las canalizaciones de Telefónica sean
puestas a disposición de quien las precise y que el despliegue
que hasta ahora ha hecho Telefónica en fase precomercial es
perfectamente lícito y había sido comunicado a la CMT
con anterioridad.
Tampoco olvida mencionar que hay quien
ofrece servios de este tipo, ONO y R por ejemplo, sin
tanto follón y sin tanto querer que se le regalen las cosas.
Cada vez se perfila más la
futura zona de revendedores,
hasta 30 megas, y la de los que de verdad invertirán en
el desarrollo de las comunicaciones en el país.