Hace ya muchos años, y durante mucho tiempo, mientras era usuario de Windows y GNOME, en los ordenadores en los que trabajaba habitualmente con Windows 95, movía la barra de tareas a la parte superior de la pantalla.
Era una manera de uniformizar mi interacción con todos los entornos gráficos, puesto que tanto GNOME como Mac OS funcionaban de la misma forma, y el único con el que trabajaba entonces que tenía este elemento en su parte inferior era Windows.
Además, me parecía la forma más natural de trabajar, y todavía me lo sigue pareciendo hoy como entonces. Es por ello que, muchas veces, cuando tengo que instalarme un Windows 10 para realizar determinadas tareas (como la redacción de esta clase de artículos; por el resto soy usuario de macOS y Ubuntu), muevo la barra de tareas a la parte superior de la pantalla.
¿Cómo podemos hacerlo? Es muy fácil: si hacemos un clic con el botón derecho del ratón en cualquier parte de la barra que esté vacía (es decir, sin ningún icono), obtendremos un menú contextual, cuya penúltima opción, que está marcada, es Bloquear la barra de tareas:
Lo que tendremos que hacer es, precisamente, desbloquearla, que será tan simple como hacer clic sobre dicha opción, desmarcándola.
A partir de aquí, para mover la barra de herramientas sólo será necesario hacer clic sobre cualquier parte de ella que esté vacía (es decir, sin ningún icono) y arrastrarla al lugar deseado.
A continuación, un par de ejemplos con la barra adherida a la parte superior del escritorio y a un lateral:
