Según un estudio de la consultora Deloitte, en EEUU la mayoría prefiere ya ver la televisión a través de Internet, en concreto un 53% frente al otro 45% que sigue siendo fiel a la forma tradicional de sofá, televisión y mando.
El 53% de estos espectadores asegura que prefiere ver sus programas favoritos en streaming a través de Internet y sin restricciones de los horarios de programación que ofrezca un canal de cable. Esto es fruto de la vertiginosa transformación que atraviesa el sector audiovisual en el país norteamericano. En 2011 era solo un 17% de la población la que aseguraba preferir ver la televisión por Internet según el sondeo realizado por Deloitte.
Esto no hace más que confirmar el peligro que corren los proveedores de televisión por cable y por satélite que están viendo como empresas como Netflix, Hulu o Amazon entre otras se están llevando a la inmensa mayoría de sus clientes potenciales hacia su terreno sin necesidad de contratar en sus hogares el servicio de televisión de pago más tradicional.
Parece que el público estadounidense se ha cansado de pagar por decenas de canales que no les interesan en absoluto y prefieren componerse la parrilla a su gusto. Ahora que en España estamos en plena polémica por la convergencia y el control de la televisión de pago ¿nos pasará lo mismo con la prevista llega de empresas como Netflix a nuestro país?